Productos de limpieza, Peligros y errores que cometemos

Como utilizamos productos domésticos todos los días, creemos que lo sabemos todo sobre ellos y que no cometemos errores. Esto es así aunque limpiemos con bastante frecuencia y hayamos dejado de rociar productos directamente sobre las superficies. Pero, en realidad, hacemos algunas cosas que deberían evitarse: mezclar ciertos productos, tirar las botellas vacías en el lugar equivocado… Esto puede repercutir en nuestra salud y tener graves consecuencias en el medio ambiente. Así que aquí están los errores que ya no debemos cometer al limpiar las paredes de nuestro baño, nuestra cocina de arriba a abajo, los suelos e incluso nuestro sofá.
Mezclar la lejía con otros productos de limpieza
Algunas mezclas de productos deben ser prohibidas de inmediato en sus hábitos. Entre ellos se encuentran la lejía + ácido cítrico, la lejía + amoníaco, la lejía + agua clorada, la lejía + vinagre, la lejía + descalcificador y la lejía + alcohol. De hecho, su combinación produce una reacción química peligrosa para la salud. Produce gases nocivos que pueden causar irritación ocular, irritación pulmonar, dolor respiratorio, mareos y dolor de garganta en los seres vivos que lo respiran. Por lo tanto, la lejía no debe mezclarse nunca con productos ácidos (es decir, los que tienen un pH inferior a 6, como los geles de baño y los descalcificadores) ni con detergentes. Un limón muy ácido también puede producir la misma reacción química. La mejor manera de utilizar la lejía es diluirla en agua.
Combinar vinagre blanco con bicarbonato de sodio o peróxido de hidrógeno
Otra combinación de limpieza que nunca debe usarse es el vinagre blanco y el bicarbonato de sodio porque juntos crean un ácido corrosivo. Además de ser perjudicial para la salud, esta mezcla puede explotar si se encuentra en un recipiente cerrado. Sin embargo, es muy eficaz para eliminar las manchas más difíciles.
La combinación de vinagre doméstico (igual que el vinagre blanco) con peróxido de hidrógeno también es peligrosa para las vías respiratorias y los pulmones.
Utilización de dos desatascadores de desagüe diferentes
Tanto si los utiliza juntos como uno después del otro, nunca debe utilizar dos productos diferentes para desatascar los desagües. Una vez más, puede que te sorprendas al ver que explotan.
Vaciar el agua usada en el fregadero o la ducha
Aunque puede ser tentador, por pereza o comodidad, tirar el agua que has utilizado para limpiar tu casa directamente al fregadero o a la ducha, no deja de ser intrascendente. Además de contaminar el planeta si el agua contiene productos domésticos fuertes, plantea problemas de higiene… Como una esponja vieja que nunca has lavado, esta agua transfiere sus bacterias a la superficie donde se vierte. Si no hay nada perjudicial para el medio ambiente en el agua, basta con tirarla por el retrete. De lo contrario, al igual que haría con los extremos de las botellas de productos domésticos caducados, deseche el agua usada en puntos de recogida específicos.
Otro error común es fregar con agua caliente. Descubra por qué.